El prefermento que transforma el sabor de tu pan
El poolish es uno de esos descubrimientos que cambian para siempre la forma de hacer pan.
Una mezcla sencilla de harina, agua y una pizca de levadura que, tras una larga fermentación, aporta al pan una textura tierna, una corteza más crujiente y un sabor profundamente aromático.
En este nuevo episodio de la serie “Tu Primer Pan”, preparamos un pan con poolish paso a paso:
un proceso accesible para quienes comienzan, pero con resultados de auténtico panadero artesano.
Qué es el Poolish
El poolish es un prefermento de origen centroeuropeo que se utiliza para desarrollar sabor y estructura sin necesidad de usar grandes cantidades de levadura.
Se elabora con la misma cantidad de harina y agua, y una mínima proporción de levadura (menos del 0,1 %).
Durante su fermentación, que puede durar entre 12 y 16 horas, se desarrollan aromas más lácticos cuando se deja a temperatura ambiente, y más acéticos si se guarda en frío.
Esa diferencia influye directamente en el perfil del pan: más suave o más intenso según la temperatura de fermentación.
Receta base del pan con poolish
Para una hogaza de 900 g aprox.
Poolish:
- 165 g harina T80
- 165 g agua
- 0,2 g levadura fresca
Masa final:
- Todo el poolish
- 385 g harina T80
- 200 g agua
- 11 g sal
- 2,5 g levadura fresca
Horneado:
- 20 minutos a 250 °C con vapor
- 20 minutos más a 240 °C sin vapor
Consejo: deja enfriar el pan al menos una hora antes de cortarlo.
La miga terminará de asentarse y conservará mejor la humedad.
Por qué funciona tan bien
El secreto del poolish está en el tiempo:
permite desarrollar el gluten y los aromas de forma natural, sin necesidad de amasado intensivo.
El resultado es un pan equilibrado, con corteza dorada y un interior suave y húmedo.
Si es tu primer pan con prefermento, notarás la diferencia desde el primer corte:
la miga será más elástica y el sabor, mucho más profundo.
💬 Conclusión
Este pan con poolish es una puerta de entrada perfecta al mundo de los prefermentos.
Requiere poca levadura, algo de paciencia y un bol con tapa.
El resto lo hace el tiempo.
Celebra el Día Mundial del Pan o cualquier día con esta receta que combina sencillez, técnica y sabor artesano.
